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La Frecuencia Vibratoria
La Frecuencia Vibratoria
Somos un cuerpo físico, somos también energía. Somos chispa de la llama divina creadora contenida en la materia. Cada pensamiento y cada emoción que tenemos, emite una onda energética de vibración, que se sintonizará con aquello que resuene en la misma frecuencia.
Por ello, es fundamental que toda vibración energética que emitamos, sea CONSCIENTE, para lograr un intercambio armonioso con las cosas y con las personas con las que entramos en contacto, lo cuál generará que te des cuenta por reflejo de lo que ocurre fuera, cómo estás vibrando dentro.
La situación actual mundial en que vivimos, nos ha llenado de mucho estrés, temores, e incluso dolor, por tener que afrontar una situación tan dura como la pandemia, las enfermedades, la pérdida física de seres amados, las guerras, la política, las noticias amarillistas y un compilado de muchas otras cosas más, que nos sumergen sin darnos cuenta, en sentimientos de tristeza que terminan convirtiéndose en regentes de nuestras vidas incluso de manera cíclica, día tras día, atrayendo como consecuencia, energías de esa misma densidad.
¿Cuán conscientes somos de lo que dejamos entrar en nuestro subconsciente? Nuestra manera de ver la vida y estar en la vida ¿por cuáles razonamientos se abre camino?
Si notamos que nuestra energía no está fluyendo armónicamente, necesitaremos incrementarla, y para ello, podemos hacer algunas cosas muy fáciles, que nos ayudará a elevar nuestra frecuencia para alivianar. La energía pesada no es fácil de llevar, podemos resolver las cuestiones con guerras y conflictos, lo cuál nos llevará a aprender pero ello es desgastante para nosotros porque quedamos agotadas. En cambio, cuando elevamos nuestra energía o ahorramos nuestra energía, podemos ver las cosas en otra sutileza y resolverlas de manera más liviana y práctica.
¿Energía Densa y Pesada o Energía Liviana y Móvil?
Formas de elevar la Frecuencia Vibratoria
- Conciencia de pensamiento: Cada pensamiento que después expresamos en palabras, emite una vibración, ya que el sonido tiene poder. ¿Qué piensas? Detente 3 veces al día al menos a registrar qué pensamientos están viniendo a tu mente, y déjalos pasar sin tomártelos en serio.
- Meditación: Nos ayuda a calmar el ruido mental y emocional, equilibrando todas esas estructuras y conectándonos con nuestra esencia; y además, nos ayuda a “fortalecer permanentemente el lóbulo frontal del cerebro que es la porción más evolucionada del cerebro, vinculada al aumento del pensamiento abstracto, el razonamiento cognitivo, la creatividad, provocando que el cerebro libere neurotransmisores de origen natural como dopamina, serotonina, oxitocina y endorfinas vinculados a diferentes aspectos de la felicidad”.
- Gratitud: Cuando tomamos conciencia de todo aquello que tenemos el privilegio de gozar, podemos apreciar que hay mucho por lo cual agradecer. Si nos centramos en lo que ya tenemos, nos estamos conectando con la frecuencia de la abundancia; y por ende, el universo responde con más abundancia.
- Alimentación enérgica: Consumir alimentos que contengan energía vital. Las plantas y los alimentos vegetales están llenos de la energía vital del sol, por lo que, mientras más consumamos alimentos naturales, nos sentiremos más positivos, vitales y en bienestar, lo cual impactará directamente en nuestra salud, estado de ánimo y frecuencia vibratoria.
- Escuchar música con afinaciones especiales: Cada aspecto de este mundo, está en un estado de vibración. Un sonido armónico, ayudará a elevar la vibración sin más esfuerzo que el de disfrutar de una bella melodía. Algunas unidades de frecuencia para afinar las notas musicales son capaces de crear patrones armónicos que pueden equilibrar y elevar la vibración de las personas, como la unidad de afinación 432 Hz, el tono en el que vibra la naturaleza y el universo.
- Curación con cristales
- Ecoterapia: Reconectarnos con la naturaleza, pasar tiempo en ella y tomar aire y luz del sol, nos ayuda a limpiar nuestras energías, reducir el estrés, elevar el espíritu y el estado de ánimo naturalmente. Podemos aprovechar de muchas formas este beneficio, ya sea caminando descalzos, escuchando los sonidos naturales de las aves y árboles, haciendo trabajos de jardinería, dando paseos en el campo o en los ríos.
- Organizar nuestros espacios de vida: Nuestro entorno físico refleja nuestro interior, por lo que, si nos encontramos rodeados de desorden, así nos sentiremos por dentro, y vibraremos en ese nivel, atrayendo más y más de lo mismo, convirtiéndose en un círculo vicioso que reflejará un estancamiento de nuestra parte creativa; por lo que resulta fundamental, ordenar los espacios en los que nos desenvolvemos día a día, para que nuestro interior también se ordene.
- Mover el cuerpo: La vibración es movimiento, por lo que, nuestro cuerpo debe moverse para mover esa vibración. Aunque sean pequeñas cantidades de ejercicio, nos ayudarán a subir la vibración, porque nos ayudan a aumentar las endorfinas sanas, que nos inducen a tener un mejor estado de ánimo, conectándonos con la alegría.
- Limpieza curativa con agua: El agua es poderosa y nos ayuda a vigorizar nuestros chakras, calmar los músculos, clarificar y limpiar el cuerpo y la mente y subir nuestra energía. Una forma de hacerlo es activando sus moléculas, mediante palabras de amor o música de alta frecuencia, como lo demostró el japonés Masaru Emoto, quien fotografió las moléculas del agua expuestas a vibraciones positivas y negativas, obteniendo resultados asombrosos, en donde tales moléculas adquirían formas armónicas cuando eran expuestas a vibraciones positivas y de amor, y todo lo contrario con las vibraciones negativas; por lo que, dado que nuestro cuerpo está compuesto por un alto porcentaje de agua, sin duda, usar el agua energizada, nos ayudará a subir las frecuencias vibratorias.
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